El despertar de la conciencia humana

Esta realidad es el resultado de lo que en 80.000 años ha percibido el resto de la humanidad. Por ello la vemos todos de la misma manera. No es nuestra percepción, es la percepción de miles de cerebros que han transitado por esta humanidad. Es la realidad del ego del ser humano por 80.000 o 100.000 años. Nuestros pensamientos no son nuestros pensamientos, son una repetición de los de otros.

¿Soy real o soy un sueño creado por otros?  Mi realidad es un escenario creado por mi ego. Así que cuando superas al ego superas este escenario. ¿Pero hay algo más que esto? Por supuesto que hay algo más. El problema es que estamos dormidos y eso nos impide ser conscientes de que hay algo más.

Desde que nacemos hasta que morimos estamos dormidos dentro de un barco que fluye por ese río de la vida, sin que nosotros dirijamos ese barco como capitanes que deberíamos ser de nuestra propia realidad.

¿Qué es el despertar de la conciencia? Es despertar a lo que normalmente no creemos, abrir la mente. El despertar es como la transformación de oruga a mariposa. Sólo que para despertar y volar, la oruga debe pasar por el proceso de oruga a mariposa. Si seguimos dormidos atados a esta realidad, vamos a seguir sufriendo y nuestro cerebro va a seguir funcionando como los últimos 80.000 años. Sin evolucionar.

¿Cómo trascender el miedo? Nuestro principal miedo es morir, pero sobre todo, dejar de Ser. En conclusión, miedo a perder este Ego. Pero cuando entiendes que esto es como un sueño, pierdes el miedo a dejar de ser. Mientras dormimos y soñamos no tenemos consciencia de nuestro cuerpo, sin embargo no dejamos de ser, de existir. Cuando tienes conciencia de este sueño y comprendes que nunca vas a dejar de "SER" el miedo se desvanece.

No es el cerebro del ego como tal el que debemos utilizar. Ha de abrirse el corazón, porque dentro del corazón existe una energía tan trascendental que cuando la conectamos a nuestra conciencia, en nuestro cerebro se abre una percepción muy diferente a lo que normalmente estamos viviendo. Y cuando la conectamos más allá del ego abrimos un río de conciencia en el que estamos todos unidos. En el corazón se encuentra la vibración más alta que tiene este animal humano. Y eso lo podemos percibir en nuestro cuerpo. Eso que sentimos en el corazón es algo único. Como todo, si el corazón cada día lo empezamos a ejercitar se va a comenzar a abrir, por decirlo de alguna manera.

La diferencia entre el amor y el miedo es que el miedo tiene una vibración muy baja, muy terrenal, muy densa. El amor tiene una vibración muy alta. Y estamos entrando a una etapa de una muy alta vibración en nuestro planeta procedente del Cosmos. Tenemos que estar en sintonía con estos cambios,  y  aumentando nuestra vibración seamos más felices, nuestro ADN despierte y nuestra mente también empiece a elevarse.

Somos radiorreceptores y podemos ser radiotransmisores. Nuestro cerebro está diseñado para estar recopilando toda esa información que existe en ese éter, que yo la llamaría la 4ª dimensión (dimensión del espacio-tiempo). En esa dimensión donde no hay materia, sólo hay vibración, Y están esos pensamientos de estos 80.000 años de todos los seres humanos. Nuestra mente recoge la información de ése inconsciente colectivo y eso es lo que está creando nuestro día a día.

Cuando de repente estamos en silencio, nuestra mente se aquieta. Está demostrado también que una parte de nuestro cerebro cuando se aquieta puede conectarse más allá de ese inconsciente colectivo. En esa 4ª dimensión, se concentra más del 90% de los pensamientos diarios, como el miedo, el sufrimiento, la ira, el resentimiento, la supervivencia… Porque desde que apareció el homo sapiens hemos adquirido esos pensamientos, ya que era necesario para esa supervivencia. Pero no sólo la mente tiene esos pensamientos, el cuerpo también está preparado para subsistir y segrega unas sustancias de miedo para sobrevivir. Y eso es lo que estamos recibiendo cada día de información en esa 4ª dimensión. Miedo y supervivencia.

Cuando el ser humano tiene un momento de paz, de amor, esos neurotransmisores de miedo se aquietan y disminuyen. Surgen entonces neurotransmisores como la dopamina, la serotonina y la endorfina, que es cuando tu mente empieza a crear pensamientos diferentes, como la belleza, desde una pintura, a un poema, o el abrazo a otro ser humano. Porque nosotros no vamos a abrazar a un ser humano desde un neurotransmisor de miedo. En cambio, cuando abrazas a un bebe y lo colocas junto a tu corazón, tu cuerpo empieza a producir esas endorfinas. Y claro, es muy diferente el comportamiento de un cerebro con un neurotransmisor de miedo a otro de amor. Y cuando viene ese neurotransmisor, te sientes bien en armonía con el todo.

No hay diferencias sociales, tu mente traspasa esa barrera del miedo y estás en otra dimensión de amor y armonía. Todo está bien, te sientes bien y además desde la medicina se ha demostrado que el cuerpo, las células, empiezan a trabajar también muy bien. Enfermas menos, tu sistema inmunológico funciona mucho mejor y las bacterias y virus no te van a agredir porque el sistema inmunológico los destruye. El miedo y la ira desestabilizan el sistema inmunológico.

Que bello sería que saliéramos de este escenario del miedo y penetráramos a otra dimensión del amor y de la armonía. Para ello se necesita voluntad y tener la conciencia de que esa dimensión existe porque aunque no la veamos la sentimos en nuestro cuerpo y en nuestra mente cuando nos relajamos y meditamos. Hay que buscar esa zona de amor y paz dentro de nosotros. Está demostrado que hay una parte del cerebro que puede conectarse con esa 4ª dimensión. Cuando una persona está en un pensamiento de amor, meditación... se le activa. La conciencia es eso. Despertar ya como seres humanos para alcanzar el fin por el que estamos aquí.

Antes, durante estos 80.000 años hemos sido como niños que no sabían cómo utilizar esa manera de conectarse con el Todo, nos ha llegado el tiempo de ser adultos y saber que todas las acciones tienen sus consecuencias.